Sé que es muy difícil de asumir lo que os voy a contar, pero antes o temprano lo teníais que saber: no soy perfecta. Lo sé, se os acaba de caer un mito y no sabéis como sus vais a levantar cabeza.
Andaa, andaaa, tiraaa que cosas peores se han visto. Ni más ni menos: la coleta de Pablo Iglesias. Pero eso es otro tema del que ya hablaré en profundidad y al que le tengo muchas ganas. Con la de cosas que le podría hacer yo a ese pelo….
No soy perfecta por muchas razones, pero no es plan de ponerme aquí a contar lo amorfa que soy y que procedo de otro planeta del universo, para que se me vayan restando los pretendientes de la lista. No es plan tampoco de arruinarme la vida contando en un blog cosas que sólo deben saber mis más allegados, porque eso les hace sentirse gente especial. Especiaaaaaaaaaaaaal (rollo mongolito). Todos juntos: Especiaaaaaaaaaaaaaaaal.
Lo que venía yo a contaros, con esta adrenalina que manejo, es mi adicción más suprema en la vida, que muy poca gente entiende pero que basta con hacer pop y no encontrar el stop. No estoy hablando de fumar, beber, comer chocolate, devorar el pan, adorar el guacamole o reírse cuando la gente se cae. NO. Estoy hablando de una adicción que no tiene cura, que no se puede tratar y que no puedo evitar tener en mi vida.
Venga va, lo digo y a tomar por culo todo ya: Hola soy Briten y soy adicta a… LAS ADIVINAS. Se joder, las fucking adivinas que me roban el dinero que me sirve para otros pecados mortales como salir hasta el amanecer o bailar hasta acabar descalza. Mon dieu, que me encierren en Alcatraz.
Mi madre, un ser muy pequeño (¡MAMÁ TE QUIERO!), solía ir cuando yo era un pequeño mico, travieso, gordo e inquieto. Es decir, realmente no es una adicción como tal porque yo haya decidido ir en plan “ola que ase? Voy a ser rica o que ase? NOOOOOOOOOOO. Es un tema de genética, ¿Qué le voy a hacer yo si mi madre me ha pasado su gen “fortunetellerlover”? Soy una víctima y mi gente no lo quiere ver. No tengo un problema con las adivinas, no soy adicta, me lo pide mi cuerpo y yo no se lo puedo negar. Es una de mis necesidades básicas para el correcto funcionamiento de mi body. ¿Comprendi?
Entonces una vez cuando ya fui mayor (Ojo, hablamos de que tenía 16 años eh? Una mujer madura, inteligente, con las ideas claras, responsable, con inquietudes etc.) ¿Qué decido hacer?
DEJAR QUE MI GEN “FortuneTellerLover” SALIERA A LA LUZ.
Como diría mi amiga Ruizo: OOOOLE TÚ.
Lo sé, fui más valiente que Hitler cuando supo que venían los americanos. Total que voy a la bruja (que no os la voy a describir porque entonces se va a hacer mazo famosa y no voy a poder coger cita de aquí a que me muera), escucho todo lo que tenía que decir y no dejo de pensar en ello durante los siguientes 5 años. Fue una experiencia religiosa, nunca había sentido nada igual. Un cosquilleo en la tripa, una adrenalina, un no sé qué TAAAN TOP, que ni ligando con Brat Pitt, Ashton Kutcher y todos los tíos gueeenos de la tierra juntos JAMÁS sentiré ni la mitad de lo que sentí en ese momento.
Por no comentar lo GUAY que fui en el cole cuando lo conté. “You can’t sit with us” o “Talk to my hand” fueron algunas de las frases que tuve que soltar. “You are not on the guest list” también. Los de la LOGSE que se pongan las pilas que paso de traducir.
De verdad que adivinó cosas que pasaron años después, a día de hoy mis amigas y yo seguimos diciendo algo así como:
Nunca volví a ir hasta años más tarde que mi gen se volvió a activar. Ay mamá la que has liao. Desde entonces voy una vez al año aprox. El año pasado fui dos veces, pero fue un accidente y lo digo de verdad.
Hay que tener cuidado con las adivinas y dar con la acertada, porque después de ir a esta DIOSA fui a otra que no me acertó ni el blanco de los ojos. Pero ni el blanco de los ojos literal.
“Veo un viaje al extranjero que te va a cambiar la vida, os vais a cambiar de casa, se te ha muerto alguien cercano, tienes sida, tu perro vuela, tus ojos son azules, usas una 34, pesas 70 kilos, has estudiado ingeniería, tu madre está muerta, te llevas bien con tus hermanos, tienes una relación especial con tu padre y dentro de 4 días vas a ser directora general de una multinacional.”
WHAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAT?
Erm…a ver. A ver cómo gestiono yo esto sin dejar huellas y sin que la guarra de tu madre (que está en la salita de al lado viendo Sálvame) se entere de que te estoy degollando. Cabrona.
Que no se me ha muerto alguien cercano, mediano o lejano, que no tengo sida porque mis análisis están mejor que los tuyos al nacer, que mi madre está más viva que la tuya cuando salga de la habitación y la tenga matar a ella por tenerte, que una persona tan gorda no cabe en una 36 y que como no me traigas una pócima de ese viaje a Narnia para que mi perro vuele o mis ojos sean azules, ya puedes devolverme el lingote que te he tenido que robar para pagarte. Zorrón.
Más o menos eso fue lo que pasó. Lo lógico en una persona que está bien de la cabeza es que decida no volver a una ladrona como ella. No obstante yo, que ni estoy bien de la cabeza ni suelo utilizar la lógica, decido seguir alimentando a mi gen, que ya bastante tiene con el nombre que le he puesto.
Posteriormente, en un viaje a Barcelona pasé por una tienda que tenía anillos y pulseras de plata en el escaparate. Como me encantan, le dije al alto que entráramos que “solo sería un segundo”. Cualquier hombre con novia sabe que jamás hablamos de un segundo, y que nunca es sólo para mirar. ILUUUSOOOOS. Para mi sorpresa, y su desgracia, entramos en una de tienda de brujas en la que se vendían artilugios que sólo ellas entienden para lo que sirven. Había barajas de cartas más raras que una manzana de color morado, velas de múltiples tamaños y formas, libros de astrología y… un cartel bien grande que ponía: MEDIA HORA: 20 EUROS.
SEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE JADEEEEEEEEEEEEEER. Fortunetellerlover estaba a tope, rollo como si le estuvieran poniendo Maxima Fm a todo volumen. FIESHTAAAAAAAAA. Yo miraba al alto riéndome con cara de:
Él, como siempre, intentaba hacerme entrar en razón “Ana que no, que acabas de ir a una y no te ha acertado nada!”, “Ana venga que estas cosas son mentira”, “Ana mememe, Ana mimimi”. Total. Que acaba entrando conmigo. Ana:1- Alto:0.
La verdad es que como suelo apuntar las cosas por eso de que tengo memoria pez y (insisto) esto fue un accidente…. No me acuerdo de la mitad de las cosas que me dijo. Sólo me acuerdo de que hablaba de vidas pasadas. Imaginaros lo que pude ser yo en otra vida pasada…. Otro post CIEN POR CIEN.
Después del robo a mano armada y de este pequeño accidente insignificante, decidí volver a la DIOSA SUPREMA. Desde el año pasado (Octubre 2014 para ser exactos) literalmente me ha adivinado TODAS las cosas que me dijo que pasarían. Y todas, son todas. Por eso, he tenido que volver a ir, para asegurar mi futuro y otros menesteres de personan non-cuerda. Es una cuestión de principios, cuando seáis mayores lo entenderéis.
No obstante, me he prometido a mi misma no volver de aquí a dos años.
Lo juro.
Bueno erm…Paz nenes
P.D.. Quien quiera el teléfono de mi brujita que me mande un mail a elblogdebriten@gmail.com.
Es la mejor y compartir es vivir.